Podemos forzar compasión y gratitud desde la mente, pero esas ideas se desvanecen rápidamente en los patrones automáticos de urgencia, en el estrés cotidiano, en la desconexión de la tierra y de la vida misma que nos sucede.
Por el contrario, cuando cultivamos estas cualidades / energías / sensaciones (¡como más te agrade llamarlas!) desde la presencia, a través del movimiento, la consciencia corporal, la atención plena en la vida tal cual es, emergen natural y progresivamente como vivencias que son superlativas a las ideas y pensamientos sobre los mismo conceptos y que, además, de esa manera nos aportan mayor perspectiva, amplitud, calma interior y un verdadero refugio en donde aliviarnos, nutrirnos y regenerarnos.
Este es un curso corto que incluye teoría y práctica. En el contenido disponible encontrarás:
• Una introducción sobre la compasión y la autocompasión desde la perspectiva budista.
• Una introducción y consideración sobre la gratitud a partir de las enseñanzas de David Steindl-Rast (Vivir Agradecidos).
• Tres prácticas simples y combinables entre sí de qigong somático, sensitividad, meditación de pie y consciencia corporal-respiratoria, para cultivar las energías de compasión y el autocuidado, la energía del corazón y la gratitud y la alineación con la vida desde tu esencia.
El qigong somático tiene una diferencia respecto al tradicional o terapéutico que es que seguimos las sensaciones y usamos el movimiento como exploración. No se trata de repetir mecánicamente sino de crear cada vez, desde la atención a tu cuerpo-mente habilitando lo que te sugiere, confiando en tu propia capacidad de guiarte en la experiencia. Eso hace que la práctica sea siempre novedosa y que cada vez que la realizas te abra a distintos matices y posibilidades de consciencia.
No hay momento de la vida en el cual no podamos recurrir a la compasión y a la gratitud, siempre es posible y de eso se trata este curso, no buscar ni armar pensamientos positivos, sino sentir y reconocernos vivas.